MARCO AGRIPPA, HIJO DE LUCIO, CÓNSUL POR TERCERA VEZ...
En realidad el edificio que vemos hoy en día fue contruido bajo las órdenes del emperador Adriano, un poco más tarde, entre los años 118 y 125.
Pero hubo un día en el que en este mismo lugar Marco Agripa si que levantó un templo en hornor a su suegro y amigo el emperador Augusto, que, como era muy "modesto" hizo que se dedicara a las divinidades de la familia Julio-Claudia.
Es el templo antiguo de Roma que mejor se conserva, claro está que se transformó en iglesia a principios del siglo VII.
Aunque en pleno barroco, el papa Urbano VIII "Barberini" decidió arrancar los clavos, las placas de bronce y las vigas que adornaban la entrada. Esque los papas eran muy apañaicos y lo aprovechaban todo, entonces utilizó todo esta material para que un tal Bernini pudiese construir el famoso Baldaquino de San Pedro.
De hay viene el dicho de Pasquino " Lo que los bárbaros no hicieron, lo hicieron los Barberini".
La entrada al Panteón o templo de todos los dioses, es gratuita, así que no se aceptan excusas para no entrar a ver la mayor bóveda realizada nunca en albañilería. Ni siquiera es superada por la cúpula de San Pedro.
Si tenéis "suerte" y llueve será un espectáculo ver como el agua entra por el inconfundible ojo de buey de 9m que ilumina este mágico templo.
Horario: 8.30 a 19.00, los domingos está cerrado.
Para enmarcar este espectacular templo Clemente XI se enargó de demoler varias casas para construir la plaza de la rotonda. No, no hay ninguna carretera y tampoco creemos los dueños de dichas casas hayan cobrado ninguna indemnización.
Es una de las plazas más animadas de la ciudad, os recomiendo comer un gielatto sentados a los pies de la fuente de Giacomo della Porta, con el panteón de fondo saben todavía mejor.
NO SEÑORA, NO ES GENE HACKMAN...
Es una de las plazas más animadas de la ciudad, os recomiendo comer un gielatto sentados a los pies de la fuente de Giacomo della Porta, con el panteón de fondo saben todavía mejor.
NO SEÑORA, NO ES GENE HACKMAN...
No todo iban a ser artistas italianos en este viaje, en la galería Doria Phampilj, se encuentra un famoso cuadro de Velázquez.
El retrato del Papa Inocencio X, uno de los retratos más impresionantes del pintor español. El propio Papa, cuando lo vio terminado dijo: Troppo Vero!!, demasiado Veraz.
Bajo la frase "criterios de montaje originales", las pinturas de este museo parecen estar un poco "amontonadas" y no muy bien ilumindas. Aunque merece la pena entrar solo por contemplar de cerca este increible retrato. La entrada no es muy cara y se encuentra ubicado en una de las calles más concurridas y comerciales de la ciudad.
Horario: 1oh - 17h, Jueves cerrado (consultar web oficial).
Al salir del museo podéis dar una vuelta por la famosa y ruidosa, Via del Corso. Si "via Condotti" era apta solo para Lomanas, en esta calle ya hay tiendas más asequibles para el resto de los mortales. Es una da las arterias principales de la ciudad que une Piazza Venecia con Piazza del Popolo.
Si miráis en dirección al Popolo hacia la mitad de la calle, a la izquierda podréis otra piazza más, Piazza Colonna ¿por qué colonna? En ella se encuentra la Columna de Marco Aurelio.
El emperador, tras sus victorias contra germanos y sármatas (171-175), no se conformó con celebrarlo con una cena y unas copas. Decidió construir esta columna, porque yo lo valgo!!
PÓNGANSE SUS GAFAS: ROME 3D
Ahora, bajando por Via D. Bergamaschi, llegaréis a la Piazza de Sant'Ignazio. Muy bien, una vez allí las instruciones son:
Entrar a la iglesia de Sant'Ignazio de Loyola, buscar un punto señalizado en el suelo, hacia el centro. Ahora mirar hacia arriba.......tachaaaaaaaaaaaaaaannn.
Esto si que es 3D amigos, esque estos artistas del barroco eran unos visionarios y unos siglos antes al estreno de Avatar, Andrea Pozzo ya ofrecía espectáculos en tres dimensiones, a golpe de pincel y sin necesidad de gafas de plástico.Después de disfrutar de este maravilloso fresco y con un dolor considerable de cervicales ; ), podéis dirigiros a la Piazza della Minerva.
Un pequeño elefante que carga un obelisco, obra de Bernini, os dará la bienvenida a esta plaza. Sobre las ruinas de un antiguo templo dedicado a la diosa que da nombre a esta pequeña plaza, hoy se encuentra la iglesia Santa Maria della sopra Minerva.
Entre otros tesoros, Minerva esconde nada más y nada menos que el célebre y sereno Cristo de Miguel Ángel. Seguro que a todos os extraña el paño dorado que se encarga de tapar sus, ejem, partes nobles. A Miguel Ángel nunca se le habría ocurrido hacer algo así.
En realidad fue añadido después, en la contrarreforma. Menos mal que un tal David se libró de lucir esta modelo de ropa interior un tanto desafortunado...
Bufffffffffffff, despues de toda esta ginkana artística y os habréis ganado un par de trozos de pizza y un gelatto doble, o triple.
Como nosotros teníamos en apartamento en Campo dei Fiori, tras descansar un rato, disfrutamos de nuestro premio culinario viendo atardecer en compañía de nuestros cuatro amigos.
El atardecer de Roma es increible, el cielo rosado baña de calidez las fachadas, las fuentes, las esculturas....
Todavía era pronto para irnos a dormir y como ya erámos unos yonkis del arte, no queríamos irnos a la cama sin disfrutar de una maravilla más.
LA DOLCE VITA
Si para las más glamurosas no ha sido suficiente emular a la gran Audrey Hepburn en la escalinata de Piazza Spagna, todavía tenéis una oportunidad más de sentiros como una estrella del celuloide. Si no os da vergüenza daros un baño el la Fontana de Trevi, podréis ser igualitos a la protagonista de "La Dolce Vita"
Esta impresionante creación de Nicola Salvi, esta literalmente abarrotada de turistas a todas horas, tendréis que "pelearos" para haceros un hueco y poder sacar la foto de rigor lanzando al aire la moneda que os asegurará el billete de vuelta a Roma.
Tanto por la noche, como por el día, la Fontana os dejará sin aliento haciendo gala de toda su exuberancia barroca.
Sin duda es una visita que nadie debe perderse.
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